TRADICION JACOBEA

La tradición jacobea se sustenta en la creencia de que el cuerpo del Apóstol Santiago fue enterrado en un sepulcro en Compostela y al amparo de este creencia se propagan una serie de leyendas difundidas con ardor por los peregrinos. Muestra de todo ello ha quedado representado gracias a pintores, escultores , canteros… no sólo en España sino en toda la Europa occidental cristiana.

A Iria Flavia llegó Santiago llamado “ El Mayor” con el único fin de convertir a los que habitaban estas tierras. Fue en Finisterre donde encontró sus primeros discípulos, los cuales se encargarían, una vez muerto el Apóstol , de traer sus restos hasta Santiago de Compostela allá por el año 813. . A Él se atribuye la fundación de varias iglesias, entre ellas, la de Padrón, próximo a Iria Flavia, la de Muxía o la del Pilar de Zaragoza

Es precisamente, al descubrirse la tumba del Apóstol, cuando surge un gran movimiento espiritual, no exento de aventura en cierto modo, por toda la cristiandad. No son pocos los que se lanzan en pro de visitar cuantos sepulcros de santos se conocen y por ende el de Santiago. Ya en 1123 un clérigo francés , Aimery Picaud, peregrinó a caballo hasta Compostela y a su regreso se dedicó de lleno a escribir un documento en el que se hablaba de los usos y costumbres de la gente y de la época, así como de los sepulcros, hospitales y hospederías, que los peregrinos encontraban a su paso .

Este documento , “El códice calixtino”, atribuido al papa Calixto II, aunque con muchas dudas al respecto, contribuyó en gran medida al aumento de la popularidad de este Camino que sería llamado el Camino Francés. Con el paso del tiempo todo este movimiento espiritual quedó refrendado por el papa Urbano VII al consagrar a Santiago como patrón de España; respaldado, a su vez, por otro pontífice como fue León XIII en el momento en que se confirmó el hallazgo de la reliquia del Apóstol en 1879.

Este año 2010 al ser Año Jacobeo, esto ocurre cuando la festividad del Apóstol Santiago, 25 de julio, cae en domingo, está dando lugar a que afloren o resuciten por doquier, Caminos Jacobeos no conocidos o recordados , aunque no por ello documentados.

En unos casos es el reclamo turístico, por encima de otras cuestiones más importantes como son las religiosas, lo que hace que despierten y desempolven caminos y rutas a lo largo y ancho de nuestro país. No olvidemos, a la hora de promocionar estas rutas, lo que la peregrinación supone : un camino de riqueza espiritual y comunicación intercultural por encima de todo lo demás.

No está ajena a toda esta Tradición Jacobea la provincia de Guadalajara , de donde soy natural y resido.. Nuestras autoridades provinciales, en su anhelo por dar a conocer los valores, riquezas culturales y rincones paisajísticos que encierra la provincia, están promocionando Caminos tan dispares como: “ El Camino del Cid “ o “La Ruta del Quijote”, por otro lado muy vinculadas a nuestra propia Historia y Literatura, y últimamente con ocasión de ser Año Jubilar se hayan inmersas en la tarea de dar a conocer las seis rutas del Camino de Santiago, que cruzando nuestras aldeas, villas, pueblos y ciudades enlazan con el Camino Francés allá por tierras de Castilla y León, después de dejar atrás La Alcarria, La Campiña, o las zonas altas de La sierra de Atienza o las parameras del Señorío de Molina.

Lejos quedan los tiempos en que dichos Caminos surgieron como una contienda entre moros y cristianos. En nuestra provincia, como en tantas otras, las órdenes militares de Santiago tenían como una de sus obligaciones la de proteger a cuantos peregrinos transitaban por ellos. Villas, fortalezas, hospitales, iglesias, asilos, ermitas y monasterios como el de Monsalud , en Córcoles, Bonaval , en Retiendas, o Óvila, próximo a la localidad de Trillo, en los que los peregrinos encontraban descanso y agrandaban su espíritu con las reliquias que allí se albergaban, fueron proliferando por estas tierras castellanas al amparo del Camino de Santiago.

Aunque las Rutas Jacobeas han pasado por largos periodos de olvido y completo desuso y recibido las más demoledoras agresiones, ahí queda para nuestro disfrute y legado cultural esa arquitectura expresamente erigida para el Camino , no en buen estado de conservación en la mayoría de los casos, que iban necesitando por seguridad y necesidad cuantos peregrinaban a la tumba del Apóstol.

Topónimos vinculados al Santo, gran profusión de símbolos en portadas, retablos, e imágenes, son, en definitiva la huella y herencia que nos ha quedado y que conviven con nosotros al formar parte de nuestro patrimonio cultural y que puede ser oportuno, dado el momento actual , ponerlo al alcance de todos aquellos que viven de cerca la Tradición Jacobea.

Es, sin duda, por este motivo por lo que se está llevando a cabo el estudio de las seis rutas, con el fin de adecuar, señalar y dar a conocer a los amantes del Camino de Santiago, una opción más para ponerse en marcha y de paso publicitar los bellos parajes por los que este discurre así como lo que de arte y cultura hay en estas tierras .

Bibliografía :  Guía del Camino de Santiago  ( José Manuel Somavilla ). El Camino Portugués a Santiago ( Manuel G. Rivero ). Los Caminos de Santiago de la provincia de Guadalajara ( Emilio Cuenca Ruiz - Margarita del Olmo Ruiz )

                         

INTRODUCCIÓN

Hacer el “CAMINO DE SANTIAGO “ ha sido, desde mi adolescencia, no solamente una gran ilusión, sino un reto a conseguir a lo largo de la vida.

Pero han tenido que pasar más años de los que yo hubiese deseado, para que ese sueño viera la luz: peregrinar a pie por el “ Camino de Santiago “ . Y digo bien: ¡ “ El Camino de Santiago “ ! , como si sólo existiese uno... 

Confieso mi ignorancia al creer que por “ Camino de Santiago “ se entiende una sola ruta, una sola vía, trazada desde no sé cuándo y por no sé quién, que empezaba por no sé dónde, pero que estaba claro que, en España, había que ir hasta Roncesvalles para encontrar la puerta que abre paso al Camino, a la senda que nos ha de llevar a la tumba del Apóstol Santiago.

Un camino que irá discurriendo por tierras de Navarra, Aragón, La Rioja, Castilla y León, Galicia, y que culminará en Compostela, dejando atrás más de setecientos km. de fatiga y sudor.

Un lugar en el que allá por el año 813, el obispo Teodomiro, de Iria Flavia, a pocos Kilómetros de Padrón, declaró haberse encontrado la tumba del Apóstol con la ayuda del eremita Pelagio que dijo haber visto una luz como la de una estrella posándose sobre un montículo.

Ese lugar “ Campus Stellae ” …Campo de las Estrellas, creció y amplió durante generaciones con la llegada de los peregrinos. A la postre, este camino vendría a llamarse, a finales del siglo XII, de muy distintas formas: Vía Láctea, Vía Jacobea, Camino Francés, Camino de Santiago…

Y dicho esto … , ¡ vaya si estaba en un error al considerar que no había más que un “ Camino “ ! . A lo largo de estos últimos años en los que estoy viviendo más de cerca todo lo que hace referencia a la Tradición Jacobea, y lo que supone vivir el “ Camino “ , he podido constatar como a lo largo y ancho de España se abre un abanico de rutas a Santiago de Compostela que la recorren de Sur a Norte y de Este a Oeste. 

Estas rutas no son otras que los distintos caminos hoy conocidos por todos : Camino Francés, Camino Vía de la Plata, Camino del Norte, Camino Primitivo, Camino Inglés, Camino Portugués…

Aunque en otro apartado, de esta “ mi historia ” hablaré de las andanzas , experiencias y sensaciones vividas , me gustaría reflejar en esta introducción, alguna anécdota ocurrida en mi primer contacto con el “Camino de Santiago“.

Fue en julio de 2007, haciendo el tramo gallego de “ El Camino Francés “ cuando entre Samos y Sarria, localidades lucenses, al salir de una corredoira y aún amaneciendo, apareció, como caído del cielo, un buen hombre, desaliñado él, con unas greñas pidiendo a gritos unas tijeras…, que interrumpió mi marcha.

 Allí, en el borde del camino junto a un prado envuelto por la niebla de las primeras horas del día, vi como caían entre mis manos peine y tijeras en menos de un suspiro . El buen hombre me insistió, en una mezcla de gallego y castellano, que, como buen peregrino, no podía negarme a cortarle el pelo, sin duda el Apóstol lo tendría en cuenta, aseveraba él. ¡ Cómo iba nuestro gran hombre a abandonar a sus terneros, que dormían plácidamente en el establo para ir al pueblo más cercano ! …

 No sé si fue el Apóstol, o quién fue, pero ahí me tienes haciendo de peluquero por primera vez en mi vida. De nada sirvieron mis súplicas, más por su bien que por el mío, de que nunca me había visto en cosa semejante, pero es evidente, que de nada me sirvió.

Y no terminó ahí la cosa … , pues nuestro amigo el vaquero quiso pagarme y aún se molestó porque yo no aceptaba lo que me daba.

Antes de despedirnos charlamos un rato sobre su trabajo, su vida diaria al margen de terneros y vacas, y, cosa curiosa, vi lo que es capaz de hacer la dureza del campo : aparentaba tener más de diez años de los que en realidad tenía. Su piel evidenciaba los signos prematuros de la edad, por el cansancio y la fatiga cutánea, en el contorno de sus ojos, las bolsas y ojeras, fiel reflejo, en definitiva, de lo que la agresión medioambiental logra hacer en el hombre.

Como el tiempo apremiaba y el sol no tardaría en aparecer sobre mi cabeza, continué el camino, pues todavía quedaban unos cuantos kilómetros para terminar la etapa del día. Y ahí queda la anécdota, de mis primeros contactos con el “ Camino de Santiago “.

Presentación

Jesús Angel Yela Gómez, alcarreño, de Guadalajara, enamorado de Galicia y del CAMINO DE SANTIAGO, quiere ofreceros sus andanzas, experiencias y sensaciones vividas como peregrino, a pie, del Camino de Santiago en estos últimos años. Irán apareciendo las memorias de los tramos que ha ido realizando: Camino Francés ( O Cebreiro-Santiago). Camino " Vía de la Plata " ( Sandiás- Santiago ). Camino Portugués interior ( Ponte de Lima -Santiago ). Durante este año 2010 tengo en proyecto realizar el Camino Portugués de la costa ( Viana do Castelo-Santiago ) y el Camino Inglés ( A Coruña -.Santiago ).